En esta sección detallamos lo esencial de las más eficaces y extendidas herramientas del Hatha yoga. Hoy te invitamos a practicar Bhramari Pranayama, el pranayama que te calma y fortalece y te lleva a un estado de paz, siendo de gran ayuda para alcanzar estados meditativos. Escribe Ana Párraga.
Hoy comparto contigo un pranayama sumamente reparador que combina respiración y sonido: Respiración de la abeja o Bhramari Pranayama.
Respiración de la abeja: qué es
Bhramari significa abeja y Pranayama respiración.
La respiración del zumbido de la abeja es una práctica que lleva a la interiorización de los sentidos (pratyahara).
Con las manos aislamos los sentidos del exterior, llevando a la mente a un estado de silencio, de observación y de paz.
Vivimos en un mundo expuestos a constantes estímulos externos, por esta razón, este pranayama es un excelente medio para parar las rumiaciones y observar los sonidos de nuestro interior.
Cómo practicarlo
Estas son algunas indicaciones a tener en cuenta para practicar Bhramari Pranayama:
-Se debe practicar sentado sobre un cojín de meditación. La columna debe estar erguida. Se puede adoptar la postura de meditación (ardha siddhasana) o flexionar las rodillas y colocar las plantas de los pies sobre el suelo. En esta última postura, los codos se apoyarán en las rodillas, permitiendo de ese modo, que los brazos descansen.
-Antes de comenzar toma conciencia de la respiración durante unos minutos.
-Coloca tus dedos índices y corazón sobre los ojos, tus dedos anulares bajo la nariz y los dedos meñiques bajo el labio inferior.
-Inspira suavemente por la nariz.
-Coloca tus dedos pulgares sobre las orejas y tapa los orificios con suavidad. Si tapas con demasiada fuerza se pueden producir ruidos internos molestos que no te permitirían la escucha de sonidos más suaves y sutiles.
-Al espirar une tus labios con suavidad, mantén la mandíbula relajada y los diente separados y realiza el zumbido de una abeja realizando el sonido desde el paladar. Procura hacerlo con un volumen moderado y que sea confortable de oír. De manera natural, la espiración será más larga que la inspiración.
-Lleva tu atención a la vibración que se produce en el interior de tu cabeza, en la cara, el pecho y el resto del cuerpo.
-Inspira de nuevo de manera tranquila y pausada.
-Tras varios ciclos (inspiración + zumbido) quédate inmóvil y observa las sensaciones que han surgido en tu cuerpo tras la vibración. Cuanto más tranquilo permanezcas, más se intensificará la observación.
-Haz una pausa si sientes mareos o vértigos.
Se puede practicar entre 5 o 10 minutos e incluso más si se desea.
Beneficios
Estos son algunos de los beneficios de este pranayama:
-Calma las emociones, disminuye la ira y la ansiedad.
-Nos conecta con nuestro interior.
-Lleva a un estado interno de paz, siendo una excelente preparación para la meditación.
-Mejora las infecciones de nariz.
-Estimula el sistema nervioso parasimpático.
-Ayuda en caso de insomnio, especialmente si se realiza antes de dormir.
-Una práctica regular intensifica el sentimiento de bienestar.
Esta técnica de respiración puede proporcionarte sensaciones muy placenteras gracias a las vibraciones. Practícalo y llenarás tu corazón de calma y bienestar.
Ana Párraga es profesora de Yoga por la Escuela Sadhana y el Instituto de Estudios del Yoga.
Su marca personal Siempre Yoga (en Instagram: @siempreyoga) es el fruto del estudio y la práctica de yoga durante 18 años. Su mayor interés es la transmisión del yoga, desde la alegría, la cercanía y el respeto al límite de cada alumno. Actualmente imparte clases de yoga a particulares y empresas en Sevilla.
Más información: https://siempreyoga.com/