La secuencia extática (4ª parte): La secuencia numérica de los chakras

2025-02-06

Hace miles de años la Bhagavad Gita expuso que existen tres gunas (cuerdas vibratorias) muchísimo más pequeñas que las partículas elementales y, por tanto, que los fotones. Son las responsables de construir todo el universo y, lo más importante, estas tres cualidades creadoras emanan de la Luz. Escribe e ilustra Pedro López Pereda.

 

rodilloPostura de Rodillo bajo Omóplatos

Los grandes maestros nos dejaron uno de los grandes secretos del yoga en la denominada secuencia numérica de los chakras. Este conocimiento encriptado recoge una gran información sobre el ascenso de la kundalini, así como de la función, ubicación, frecuencia de vibración y color de cada chakra.

Para comprender mejor esta serie numérica tenemos que saber que Ajna va a ser el chakra encargado de selecciona los fotones transportados en la secuencia extática para que lleguen a Sahasrara en la proporción precisa. De esta manera se formará la luz blanca que va a llegar al Ser en un proceso denominado armonización. Los fotones sobrantes los envía este mismo loto a Muladhara, lo que hace que Ajna sea el único chakra que tiene una duplicidad numérica en su número de pétalos.

Esta serie numérica, básica para comprender el funcionamiento de los chakras, se basa en el número de pétalos que tiene cada figura de loto que representa gráficamente a cada uno de ellos. Los números de estos pétalos equivalen a las frecuencias de los colores del espectro visible. De tal forma que Muladhara tiene cuatro pétalos, Svadhistana seis, Manipura diez, Anahata doce, Vissuddha dieciséis, Ajna, según esta serie, tendría dieciocho y Sahasrara (el loto de los mil pétalos) tiene en la serie veintidós, que es el número maestro más poderoso (los números maestros representan la apertura de conciencia).

serie sagrada

Esta serie matemática del número de pétalos se relaciona con la geometría sagrada y nos enseña, por ejemplo, que Svadhistana está posicionado más cerca de Muladhara que de Manipura, es decir, que es un chakra energético (más tamásico que rajásico) cuyo color rojizo anaranjado coincide con su frecuencia electromagnética.

La serie numérica también nos muestra que Anahata, el chakra del amor, esta más cerca de los sentimientos de Manipura que del discernimiento de Vishuddha.

Otra información importante de la serie numérica la encontramos en la duplicidad de Ajna, al que vemos de color índigo (color más cercano al azul que al violeta, por su cercanía a Vishuddha. Ahora la pregunta que surge es la siguiente: ¿por qué Ajna se representa tradicionalmente solo con dos pétalos?

Ajna está en dos planos, el plano superior, que le une a Sahasrara, y el plano inferior, que le une a Muladhara. Lo que le distingue es que la frecuencia de su vibración en cada uno de estos planos es diferente y por ello lo vemos índigo en el plano superior y de un tono no visible (infrarrojo) en el plano inferior. La frecuencia de vibración en este segundo caso coincide en la serie numérica con el número dos. Se grafía con dos pétalos para identificar también la dualidad de sus funciones.

→ Purificación:  Postura con Rodillo bajo Omóplatos

 Cuando la Kundalini alcanza el nivel del chakra Vishuddha se produce un proceso de purificación previo al de armonización que se realiza en el chakra Ajna.

La postura de Rodillo bajo Omóplatos estimula el chakra Vishuddha, que se encarga de absorber, procesar y transportar la esencia sáttvica. A través de una amplia apertura de la parte anterior del cuello (con la precaución de no forzar las vértebras cervicales) conseguimos activar la energía de este chakra.

La práctica de esta postura nos hace entrar a un estado de pureza, equilibrio y armonía

Material de apoyo: Necesitamos un rodillo de yoga de unos 25 cm de diámetro o una manta doblada en forma cilíndrica que lo sustituya y unas mantas para apoyar la cabeza.

Realización de la Postura del Rodillo bajo los Omóplatos

Colocamos el rodillo paralelo al lado corto de la esterilla, de manera que al tumbarnos apoyemos sobre él los omóplatos (ver ilustración de arriba del todo). Si notamos la más mínima molestia en las cervicales podemos colocar una o dos mantas para apoyar la cabeza. Con la práctica iremos quitando una de las mantas para mejorar la apertura del cuello.

Los brazos quedan extendidos a los lados, relajando suavemente la postura mientras las piernas se mantienen activas. Nos concentramos en la amplitud del setran del cuello.

Tiempo para realizar la postura

Podemos comenzar manteniendo la posición durante 2 minutos, e iremos aumentando el tiempo hasta permanecer en ella 5 minutos, que es lo que necesita el chakra Vishuddha para absorber y procesar los fotones. Para el traslado de fotones entre Vishuddha y Ajna son necesarios 10 minutos.

→ Armonización: Postura de Decúbito supino sobre mantas

El chakra Ajna está relacionado con la intuición y la sabiduría. La actividad de este centro nos faculta para llegar más allá de lo evidente, ya que nos permite ver y comprender nuestro mundo interior y su conexión con todo cuanto nos rodea.

La postura de Decúbito supino sobre mantas es la encargada de activar el chakra Ajna, que absorbe, procesa y transporta los fotones recibidos.

Con esta posición corporal conseguimos abrir el setran del tercer ojo, situado un poco más arriba del entrecejo.

Material de apoyo: Necesitamos dos o tres mantas de yoga o bien un bolster.

Realización de la postura en decúbito supino sobre mantas

Colocamos las mantas sobre la esterilla, dobladas en sentido longitudinal. Nos sentamos delante del material de apoyo y nos tumbamos de manera que las mantas o el bolster queden en contacto con la zona lumbar.

decubito supino

A continuación relajamos profundamente la postura, extendemos los brazos junto a las mantas y nos concentramos en el tercer ojo.

 Tiempo para realizar la postura

Debemos quedarnos en la postura un mínimo de 15 minutos, lo suficiente para que el chakra Ajna pueda absorber, procesar e intercambiar fotones con Sahasrara y Muladhara.

Pedro López Pereda. Creador del centro Namaskar de yoga y autorrealización en la línea de Antonio Blay. Presidente de la Fundación Yoga y de la Asociación Yoga Meditativo. Miembro de la Asociación Nacional de Profesores de Yoga. Maestro de Reiki.

Ha publicado, entre otros libros: El mandala oculto (2017), El cuenco vacío (2018) y Las leyendas del Yoga. El origen mitológico de la meditación, el pranayama y las posturas de yoga (2021).