Jon Kabat-Zinn y Saki Santorelli demostraron a la medicina occidental los beneficios del Mindfulness reunidos en la práctica inspirada de la atención plena esencial. Esta práctica meditativa ha llegado ya a cientos de miles de personas y ha inspirado un movimiento que está cambiando nuestra sociedad en muchos sentidos. Por Koncha Pinós para Espacio MIMIND.
Jon Kabat-Zinn y Saki Santorelli descubrieron que la atención plena era mucho más que meditar, que nos ayudaba a entender nuestro punto de vista convencional sobre aquello que creemos “ser nosotros mismos” y que esa comprensión y complexión del sí mismo era muy importante. La atención plena podía ayudar a los pacientes a reconocer cómo y por qué confunden la realidad de las cosas con las historias que crean y permite trazar un camino más equilibrado hacia la obtención del bienestar mental y la felicidad.
Sobre esa base entendimiento común centraron la misión central de su trabajo. Su planteamiento era que si bien el Buddha había articulado el Dharma (sabiduría), eso no implicaba que ese concepto fuera solo budista, de la misma manera que la gravedad no es solo inglesa por ser Newton su descubridor. Se trata de principios universales. Kabat-Zinnl le pidió al Su Santidad el Dalai Lama en 2005 -Conferencia de Mind & Life- si había alguna diferencia fundamental entre el Buddhadharma -enseñanzas del Buddha- y el Dharma Universal. Y la respuesta fue “no”.
Bajo esa premisa el trabajo central del Jon Kabat Zinn, Saki Santorelli, y de sus colegas se centró en traer el Dharma Universal a la mente como una corriente plena de un río que llega en beneficio del máximo de seres que sufren. Son medios hábiles para que, conscientemente, la medicina, la psicología o la educación comiencen a acercarse a un terreno más fértil donde la “compasión” sea el aspecto fundamental.
Jon y Saki pensaron que los hospitales son dukkha -sufrimiento-, un autentico imán del sufrir, donde si se enseñara el origen del sufrimiento la gestión del sufrimiento y el fin del sufrimiento podríamos ser capaces de cambiar muchas cosas.
El enfoque científico de Jon Kabat Zinn y Saki Santorelli sobre la atención plena es una estrategia sencilla para generar más comprensión de la gente hacia la idea de que se puede vencer el sufrimiento. La ciencia es una manera sencilla de comprender el mundo, lo que permite a muchas personas acceder a un conocimiento que puede ser utilizado como medio hábil para abrir la mente y encontrar nuevos modos de organizar nuestros cerebros en formación, intimar con el dolor y vencer el sufrimiento. Es un proceso básicamente de claridad de la mente.
Habilidades humanas
Hace 300 o 400 años la gente que meditaba lo hacía en conventos, monasterios o cuevas. En condiciones de aislamiento extremo, sobre todo en silencio. Ahora la meditación está en los laboratorios, en los hospitales, en las prisiones, en las empresas y hasta en las aulas. Los occidentales llevan pocos años meditando a la manera oriental, pero durante esos pocos años se han obtenido logros significativos. Ha aumentando el nivel de conciencia sobre la importancia de la atención plena, y muchos profesionales gracias a Jon Kabat Zinn y Saki Santorelli han meditado por primera vez… Eso en sí mismo es de agradecer, porque la atención plena no es un “concepto lógico a estudiar”, sino una manera de ser que requiere la práctica y el cultivo de unas habilidades que son intrínsecas a todos los seres.
Una de las maneras que Jon y Saki tuvieron de llevar la sanación y el potencial transformador del dharma a la vida cotidiana moderna ha sido haciendo ese “diccionario para occidentales de meditación” desde una perspectiva laica. La universalidad de la atención, de la conciencia, la comprensión de la naturaleza humana no es ni siquiera “espiritual”; es, como diría más tarde Howard Gardner, parte de la existencia humana.
Ser humano es usar todos los medios hábiles de nuestro tiempo, todo lo que está a nuestro alcance y ser sensibles. Su aportación más importante es hacer énfasis en el “aquí y ahora”. ¿Por qué quieres estar en otro lugar si estás en este? ¿Por qué te gustaría conseguir otra casa, otro coche, otro trabajo, otro país si estás en este? Si estamos subidos en la montaña del dolor o tenemos una enfermedad crónica, es mejor centrarnos en el presente. Conformarse con lo que tienes no es malo; es vivir el momento presente.
Mindfulness recuerda que el futuro no existe, el pasado tampoco. Hay que hacer frente a lo que hay desde el presente, las cosas son como son en este momento. Por lo tanto, la mejor manera de tratar el dolor es no huir de su experiencia, ni crearse ilusiones sobre el mismo. Sin engaños, sin daño. Sanarnos es transformarnos, y en el momento en el que aceptamos que estamos enfermos, que somos buenos o malos, feos o guapos, altos o bajos lograremos tener una visión más profunda de uno mismo y los demás. Ese es el descubrimiento de Jon y Saki para la psicología del bienestar: no es un problema sufrir; el sufrimiento es inevitable pero el dolor es opcional.
Mirada hermosa sobre la naturaleza del dolor
Por supuesto, cuando Jon y Saki empezaron no todo fue fácil; tuvieron que demostrar con personas que tenían dolores crónicos que esta práctica les podía ayudar a comprender algo profundo de sí mismos, y la comprensión debía basarse en la atención plena -no parcial-.
Su contribución en Midnfulness ha sido traer la atención plena a la cultura general, y es una gran responsabilidad por la que les estamos enormemente agradecidos. Un trabajo profundo y único, una mirada hermosa sobre la naturaleza de la experiencia misma del dolor y la naturaleza de las mentes y corazones. Un equipo de investigación científica que pone a la mente a trabajar.
Toda esta obra inicial de la primera generación de Mindfulness aprecia a la conciencia como punto de equilibrio en el pensamiento. No hay nada malo en el pensamiento, pero si nuestro pensamiento no es armónico, podemos engañarnos y estaremos perpetuamente perdidos en el laberinto del dolor.
Para profundizar más: Mindfulness para principiantes. Ed. Kairos. 2013