Avance editorial/ Esencia del Vedanta, de Swami Sivananda (III)

2024-01-31

Con motivo de la celebración del cincuentenario del Centro de Yoga Sivananda Vedanta de Madrid, se publicará el libro que escribió Swami Sivananda Esencia del Vedanta, editado por Editorial Librería Argentina. Hoy ofrecemos otro adelanto del texto.

Esencia del Vedanta

Una de la formas de esta importante conmemoración del cincuentenario del Centro de Yoga Sivananda Vedanta de Madrid (Ver programa aquí) será a través de lo que se denomina Jñana Prasad, mediante la edición de este gran texto de sabiduría del Yoga y del Vedanta, los elementos que unen la forma de enseñar de Swami Sivananda y de Swami Vishnudevananda:

Avanzamos el contenido de Esencia del Vedanta, de Swami Sivananda. He aquí dos apartados más que adelantamos:

Percepción

Los objetos que se ven en el mundo son considerados por el hombre común como existentes fuera de su cuerpo y sus sentidos, y él siente que una copia, por así decirlo, de los objetos es experimentada por él en su mente. El objeto en sí mismo no entra en su ojo ni en su oído, pero hay una trasmisión de vibración desde ese objeto, del que toma conciencia su conciencia, que se convierte en un contenido de su conciencia y, a causa de lo cual, descubre la existencia del objeto físico.

Solo el aspirante espiritual dotado de un discernimiento superior puede cuestionar la validez de esta forma de experiencia. Cuando ves a una persona, ¿cómo lo haces? Puedes decir que porque tienes ojos. Un aspirante no estará satisfecho con esa respuesta, solo con que tenga ese intelecto superior, porque desea saber cuál es en realidad el proceso mediante el cual puede estar al tanto de la existencia de otro. Se puede decir que hay una vibración, por así decirlo, que emana del objeto exterior y se convierte en un contenido de la propia conciencia, pero uno debe profundizar en estos temas, ya que incluso la posibilidad de tal vibración tiene que ser explicada.

Ves tantos objetos en el mundo, tantas formas, pero ¿cómo puedes estar seguro de su existencia? Nadie se hace esta pregunta a sí mismo, porque ya está seguro de la naturaleza de la experiencia. Solo el aspirante espiritual duda de esta situación. ¿Es cierto que uno tiene conciencia de la existencia real?

Relación sujeto-objeto

Ahora, das por sentado que estás teniendo conciencia de las cosas reales. ¿Cómo sabes que estas cosas son reales? La respuesta es obvia: a través de los sentidos. ¿Cuál es la conexión que los sentidos tienen con los objetos externos? Nadie parece saber esto, porque parece no haber ninguna relación, ningún contacto entre los órganos de los sentidos y los objetos externos.

Si no hay ningún contacto sensorial, ¿cómo puedes ser consciente de tu existencia aquí? Puedes ver a una persona a varios metros de distancia y estar seguro de su existencia, sin entrar en contacto con esa persona de ninguna manera. Puedes decir que las ondas de la luz viajan desde ti y entran en contacto con la retina de los ojos de la otra persona. Eso es cierto, pero el objeto no es atraído y guardado en tus ojos. El objeto está fuera. Incluso para tener una imagen del objeto en tu conciencia, debes tener algún tipo de relación intrínseca con ese objeto.

Nadie pensará por un momento que es posible tener contacto con un objeto externo sin involucrar en ese contacto una relación sutil, cualquiera que sea la naturaleza de esa relación. Es cierto que tenemos algún tipo de contacto con el mundo externo, aunque puede que no siempre sea un contacto físico. Existe un tipo de relación que es inteligible en su naturaleza. De lo contrario, el objeto no puede convertirse en un contenido de tu naturaleza inteligente.

Los objetos que tienen características diferentes no pueden mezclarse entre sí y convertirse en uno. Por ejemplo, una varilla de acero no se puede mezclar con leche, ya que ambas poseen características diferentes. El agua y la leche se mezclan entre sí, porque tienen un carácter similar. ¿Cuál es la naturaleza de tu conciencia que toma conciencia de la presencia de los objetos fuera? Es espiritual.

Parece ser etéreo, penetrante; de lo contario no puede comprehender el objeto externo; y si la naturaleza espiritual, la naturaleza inteligente, debiera ser consciente de la existencia del objeto exterior, debería haber algo en el objeto que fuera similar a la conciencia que tenemos en nosotros. En otras palabras, debería haber un elemento espiritual en el objeto que vemos afuera.

Este adelanto editorial es cortesía del Centro de Yoga Sivananda Vedanta.