¿Puede la meditación reducir el riesgo de alzheimer? Los médicos dicen que las personas mayores deben mantener la mente ocupada para protegerse contra la demencia… pero un estudio sugiere que meditar podría ser aún más efectivo.
El número de casos de demencia en todo el mundo se triplicará a más de 150 millones para 2050. Sin un tratamiento eficaz a la vista, cada vez es mayor la esperanza depositada en los factores de prevención relativos al estilo de vida.
Tradicionalmente, la medicina ha recomendado durante mucho tiempo que las personas mantengan la mente ocupada en la vejez para protegerse contra la demencia. Pero desconectarse de la «mente pensante» y meditar podría ser la clave para mantener el cerebro en forma, sugiere un nuevo estudio.
La pregunta que se hicieron recientemente los médicos es: ¿Podría la meditación, como entrenamiento mental de control de la atención y las emociones, preservar la estructura y función del cerebro en adultos mayores sin deterioro cognitivo?
Un grupo de investigadores crearon dos grupos de experimentación de 137 personas mayores sin deterioro cognitivo. Las personas del primero que practicaron la técnica de meditación durante 18 meses obtuvieron mejores resultados en las pruebas cognitivas que las personas del segundo que recibieron lecciones de inglés durante el mismo período de tiempo para mantener la mente activa. Uno de los autores principales de la investigación, el doctor Gael Chetelat, de la Universidad de Caen-Normandy, Francia, afirmó que la meditación fue más eficaz que el entrenamiento en un idioma no nativo en cuanto al control de la atención, las capacidades socioemocionales y de autoconocimiento.
Es la última investigación, publicada en la revista JAMA Neurology. que destaca los beneficios para la salud de la meditación, que también se ha relacionado con una presión arterial más baja y niveles de azúcar en la sangre y con el alivio del dolor. Esta vez el método de meditación elegido consistió en la práctica de la atención plena, bondad amorosa y compasión, para lograr un estado mentalmente claro y emocionalmente estable.
El Dr. Chetelat cuestionó a este respecto: «¿Podría la meditación preservar la estructura y la función del cerebro en adultos mayores sin problemas cognitivos?». Los resultados confirmaron que la meditación es un método prometedor para preservar la estructura y la función del cerebro, así como la cognición y, por lo tanto, para reducir el riesgo de demencia al incidir directamente en los factores psicoafectivos. Es evidente que las personas que llevan más tiempo meditando tienen más posibilidades de conservar sus funciones cerebrales sin deterioro.
Un rasgo común de muchas formas de enfermedad mental es la preocupación por los propios pensamientos, una condición que la meditación puede lograr detener. Se cree que la meditación basada en la atención plena es eficaz para el trastorno de estrés postraumático, que provoca pensamientos intrusivos y entumecimiento emocional.
«Se necesitan con urgencia estrategias para prevenir la demencia. El entrenamiento mental enfocado en el control del estrés y la atención tiene el potencial de mejorar los aspectos cognitivos y emocionales del envejecimiento», dijo el Dr. Chetelat.