En esta sección Javier Ruiz Calderón ofrece respuestas a nuestras dudas sobre el yoga, su filosofía y sus técnicas desde una visión de la tradición yóguica actualizada y crítica. Todos estamos invitados a escribir a Javier a info@yogaenred.com planteando nuestras dudas o incertidumbres.
Pregunta: ¿No se sitúa el no dualismo más allá del bien y del mal y, por tanto, de la ética?
Respuesta: El advaita o no dualismo —o, mejor, «adualismo»— afirma que la realidad es adual, es decir, que todas las dualidades, separaciones, diferencias, distinciones… son en el fondo falsas. Hay muchos adualismos diferentes: el shaivismo de Cachemira, el advaita vedanta, la tradición nath (la del hathayoga), el sikhismo, los budismos mádhyamaka, yogachara, tibetano, zen…, el daoísmo, el sufismo de Rumi e Ibn Arabi, el neoplatonismo, las filosofías de Heráclito, Parménides, Spinoza, Schelling, etc, etc.
Muchos de ellos afirman que solo existe una Realidad Absoluta, infinita e indivisible: la Naturaleza de Buda, el Brahman, el Ser, Dios…; otros aceptan la multiplicidad, pero creen que hay un principio o carácter común a todas las cosas (el Dao, el Logos, la vacuidad, etc.) que hace que todas ellas tengan el mismo valor o grado de realidad, que no haya diferencias significativas entre unas y otras.
Una de las distinciones más importantes es la que establecemos entre lo bueno y lo malo, el bien y el mal. Por supuesto, desde el punto de vista adualista, la distinción entre el bien y el mal —como todas las demás— es, en último término, falsa. Entonces, ¿no hay ética? ¿No hay acciones buenas y malas? ¿No hay dharma y adharma (acción correcta e incorrecta)? El yama del yoga clásico, los miembros tercero al quinto del óctuple sendero budista, los cuatro requisitos del vedanta y otras enumeraciones de formas correctas de conducta, ¿no tienen sentido si la realidad es adual?
La clave está en esa expresión: «en último término». Según el advaita vedanta y las escuelas adualistas del budismo mahayana, hay dos puntos de vista: el absoluto (paramárthika) y el relativo (vyavahárika). Desde el punto de vista absoluto, lo real es adual, no hay ni bien ni mal ni diferencia alguna. El otro punto de vista es el que tenemos las personas ignorantes: «vyavahárika» significa «práctico», «convencional», «relativo». El ignorante dice: «yo soy un individuo que vive en este mundo, que realiza acciones y experimenta circunstancias, que sufre y goza, etc.» Esto, que es falso en último término (desde el punto de vista absoluto), para nosotros es realísimo. Es como si estuviéramos soñando, o como si estuviéramos locos: la realidad es adual, pero para nosotros está llena de dualidades porque no la vemos tal como es sino deformada por nuestros apegos y aversiones.
Lo que dicen todos los grandes maestros de las tradiciones adualistas es que, mientras creamos que vivimos en un mundo de dualidades, debemos actuar teniendo en cuenta esas aparentes dualidades, aunque en el fondo no sean verdaderas. Mientras nos guste más el placer que el dolor, vivir que morir, mientras nos importen más nuestros asuntos que los de los demás, etc., es decir, mientras todas esas dualidades sean reales para nosotros, actuaremos de manera adualista queramos o no. Y, entre las diferentes maneras adualistas de actuar, la que produce más armonía individual y colectiva, la que más nos acerca a la experiencia adual que es la meta de la existencia humana, es intentar vivir según el dharma (la ética) común a todas las tradiciones espirituales: cultivando la no violencia, el amor y la compasión, la veracidad, la honradez, la templanza, la austeridad, la ecuanimidad… que, no por casualidad, constituyen el primer paso de todos los caminos, dualistas y adualistas, que conducen hacia lo Infinito.
Pero, podría objetar alguno, ¿no prescinde el tantra de la ética? O, ¿no hay maestros neoadvaita (neo-adualistas) que niegan que la ética ocupe ningún lugar en el camino espiritual? Son preguntas muy interesantes, y las comentaremos en otra ocasión.
Javier Ruiz Calderón (Shánkara) es doctor en filosofía especializado en pensamiento indio y filosofía de la religión. Es profesor en la Universidad Comillas (Madrid) y discípulo de Amma. Lleva cuarenta años estudiando y practicando yoga, vedanta y meditación. Enseña esas disciplinas, así como sánscrito y canto védico, y ha publicado seis libros y docenas de artículos sobre esos temas (véase www.jruizcalderon.com).
Actividades en curso en Madrid y a distancia: Clases de Yoga suave y Filosofía y meditación; seminario Estudio de la Bhagavad Gītā; curso Introducción al advaita vedānta (información: www.jruizcalderon.com/proximas-actividades-2).