La experiencia de paz, la emoción de quietud, esa vivencia de plenitud que no depende de circunstancias externas y se mantiene estable “en ti”, es parte de la experiencia de la no dualidad. Escribe Eva Wodnik.
Recuerdo un tiempo en que llegaba a casa agotada, me desplomaba en el sillón y me sentía harta. Hubiera querido “salirme de mi propia piel”. Muchas veces me encontraba reaccionando dolorosamente. Muchos momentos de angustia y tensión a lo largo de un solo día. La tentación de culpar a las circunstancias y/o personas “externas” de mi malestar era casi automática. Solo cuando dormía conseguía descansar de “mí”. Estaba identificada con el personaje, con mi ego. No de un modo consciente.
El ego, en las enseñanzas Advaita, es el constructo cognitivo que se siente separado de todo: el personaje. Muchas veces me sentía arrastrada por mi ego, tan intenso y agotador; pese a años de trabajo con él desde muy diferentes aspectos…
En cierto punto se desenraizó de mi experiencia. Ahora aparece a veces, como un fantasma visitándome… y “yo” estoy en paz.
Y es que cuando el ego se desarraiga y deja de tener una identidad aparentemente consistente y autónoma, el resultado en la experiencia de vivir es la paz.
Significado de no-dualidad
Las enseñanzas Advaita fueron conformadas por el filósofo hindú Shankaracharia (788-820), que partiendo de las escrituras de los Upanishads (textos sagrados hindúes que tratan sobre la naturaleza del universo, de la deidad y de la meditación), desarrolló la doctrina de la no dualidad. Estas enseñanzas impregnan todas las filosofías orientales y, por supuesto, también se integran en la filosofía yóguica.
Pero ¿a qué se refiere el término “no dualidad”? Trataré de ilustrarlo con un ejercicio sencillo, que no simple. Toda nuestra experiencia, que es percibida por nuestros sentidos y emociones, es inmediatamente identificada y catalogada por la mente. Por ejemplo, si te pellizco y sientes dolor tu mente dirá algo parecido a me has hecho daño. Si te pregunto si te has dado cuenta de que en tu mente ha aparecido: me has hecho daño, entonces me dirás: «¡Sí!». Si entonces te pregunto quién o qué es lo que se ha dado cuenta de lo que ha aparecido en tu mente y de la sensación dolorosa, entonces puede que respondas: “Yo, yo me doy cuenta de lo que pienso, siento y percibo «.
Es decir, la Conciencia se da cuenta. Este trabajo propone indagar, investigar “eso que se da cuenta”.
El salto evolutivo que la especie humana estamos dando en este momento histórico, a mi modo de ver, es el de la Conciencia: Ser conscientes de ser Conciencia. Conciencia es aquello que es consciente, que conoce. Cuando “yo soy” es Conciencia consciente de sí misma, entonces, la paz es.
Y es que cuando te vuelves hacia ti misma/o desde esta mirada abierta y curiosa, cuando emprendes este camino en el que dejas de buscar la felicidad en las condiciones externas, entonces te estás acercando a la Paz. No estoy hablando de un estado temporal de paz y felicidad o éxtasis. Es una emoción de Paz rotunda, que pasa del trasfondo de la experiencia a colorearla, a repoblarla. Una emoción de paz, de aceptación y de plenitud.
Experimentarlo no es lo mismo que entenderlo o intuirlo. Solo cuando se experimenta, ocurre el cambio consistente y congruente con esta verdad.
Para ello, en este verano te proponemos un Retiro de 5 días para explorar la Paz en ti, para que halles en ti eso que tanto deseas y buscas.
Lo acompañamos con el Yoga Profundo de Eva Klimberg, que desde el trabajo con el cuerpo y la vitalidad nos abre a la profunda experiencia de conexión íntima con nuestro ser, con lo inmutable en nosotras/os.
Para ayudarnos a integrar esta vivencia contamos con Ana Muñoz que, desde la Biodanza, nos propone sentir la experiencia de la trascendencia. Enlazando así las dimensiones energéticas, mentales, emocionales y espirituales.
Es uno de los mejores regalos que te puedes hacer.
Más allá de tu mente, la Paz.
Retiro Advaita & Yoga con Eva Wodnik & Eva Klimberg
21-25 julio – Gredos
Más detalles en: www.evawodnik.com y/o http://yogaartstudio.com/agenda/
T 627 97 74 80 – 91 064 52 15 y 645 584 395