Esta es la segunda parte de las Reflexiones de Swami Vishnudevananda acerca de la meditación. Tres capítulos que nos aproximan a la experiencia del silencio. Es una colaboración del Centro Sivananda. (Primera parte)
«La salud es la riqueza, la paz mental es la felicidad, el Yoga muestra el camino.»
La misión de Swami Vishnudevananda fue difundir el Yoga en nombre de su maestro, Swami Sivananda.
Fundó los Centros Internacionales de Yoga Sivananda en 1957 y estableció la institución «True World Order», la cual promueve la paz universal.
Superar las limitaciones internas y externas era el mensaje de sus numerosas misiones de paz.
La meditación es un tónico mental
Desde un plano puramente físico, la meditación ayuda a que se prolonguen los procesos anabólicos corporales de crecimiento y de reparación y a reducir los procesos catabólicos de destrucción. Los procesos anabólicos predominan habitualmente hasta que alcanzamos los 18 años. Entre los 18 años y los 35 prevalecen los procesos catabólicos. La meditación reduce de forma considerable este declive, por la receptividad de las células del cuerpo a sus vibraciones favorables.
Solo recientemente los científicos han sido conscientes de la relación entre la mente y las células. Hace unos años reaccionaban con un exagerado escepticismo a las demostraciones yóguicas de control de la mente sobre las denominadas funciones involuntarias como el latido del corazón, la respiración y la circulación sanguínea. Creen que el sistema nervioso autónomo es independiente de cualquier proceso mental consciente. Las técnicas de biorretroalimentación, sin embargo, demuestran en la actualidad que la mayoría de las funciones corporales pueden ser controladas a través de la concentración.
Investigaciones recientes demuestran el hecho de que la mente puede controlar la actividad de una sola célula y de un grupo de células.
Cada una de las células del cuerpo es dirigida instintivamente por la mente subconsciente.
Cada una de ellas tiene una conciencia individual y otra colectiva.
Las células se activan cuando los pensamientos y los deseos se introducen en el cuerpo y éste siempre obedece sus exigencias.
La meditación es un tónico poderoso que produce, con carácter general, una importante aceleración de energía hacia las células individuales. De la misma forma que los pensamientos negativos pueden contaminar las células, los pensamientos positivos pueden rejuvenecerlas y retrasar su declive.
Las vibraciones pueden prevenir y curar enfermedades al penetrar en las células. La meditación es también un tónico mental. Las ondas calmantes que produce ejercen un efecto favorable en la mente y en los nervios, provocando un estado mental positivo duradero.
De esta forma el mundo interior obedece las instrucciones de la mente y mejora la salud física, la agudeza mental y la tranquilidad.
Es una colaboración del Centro de Yoga Sivananda Vedanta
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