OM Shree OM. Cultivando el cuerpo, la mente y el espíritu de los niños a través del yoga es el libro de Christine McArdle. Un regalo que ella nos hace, pues en él están contenidos muchos años de aprendizajes y enseñanzas en torno al yoga y la educación de los niños. Editorial Librería Argentina.
Dice Christine McArdle en la introducción de su obra: «Originalmente este libro fue escrito como un manual de profesores para acompañar a la formación del profesorado ‘Om Shree Om’. Agradezco en particular a los maestros que se formaron conmigo durante los años 2004 al 2014, ya que muchas noches después de la formación, volvía a casa para seguir reflexionando sobre los temas que exploramos juntos y agregaba así otro capítulo u otra frase clave al manual. Gracias también por ayudarme a comprender lo que es cultivar a un maestro de yoga para niños, en cuerpo, mente y espíritu».
Así explica los beneficios de enseñar yoga a los niños la autora: «Yo creo que las clases de Hatha Yoga para niños pueden y deben ser mucho más que la simple introducción de yogasana a través del juego. Observando atentamente a los niños con amor, curiosidad y gratitud, e incorporando ciertas técnicas y actividades en su estilo de enseñanza, podréis ofrecer a vuestros estudiantes, hijos y a vosotros mismos, mucho, mucho más, haciendo que vuestro viaje juntos sea épico en lugar de ordinario. Seréis bendecidos por la energía y la belleza de los seres pequeños cuyas luces os tocarán e inspirarán. Que vuestras transformaciones personales y las de ellos sean bellas y profundas».
‘Om Shree Om’ es un nombre inspirado en la frase ‘Home Sweet Home’, ‘hogar dulce hogar’. «En este método -continúa Christine- se unen enseñanzas y prácticas concretas de Hatha Yoga con la pedagogía y la crianza holística, integradora, de apego y respeto, esto que hoy llamamos
‘educación alternativa’, pero que considero que en realidad es una educación ancestral».
«Practicamos yoga para despertar, para equilibrar, para obtener revelaciones, para elevar y transformar la conciencia (cit en sánscrito), para restablecer una conexión sana con algo más grande y más significativo en nuestras vidas. También buscamos el éxtasis en nuestra práctica (ananda en sánscrito), ¡porque el yoga y el amor se sienten muy bien, porque nos divertimos en este espacio sagrado!».
«Enseñamos yoga para mejorar la vida y llevar esta alegría a los demás, para ofrecer belleza y expresar nuestro amor, nuestro arte. La práctica de yoga, cuando se realiza con esta intención, permite a los niños experimentar plenamente el amor, la belleza y la magia que llevan dentro y que les rodea».
Las partes del libro
Este libro está dividido en tres partes. En la primera, ‘El maestro y la práctica’, la autora habla del rol y el arte de ser maestro de yoga por, para y con los niños, a nivel de cuerpo, mente y espíritu.
En la segunda parte del libro se repasa las edades de los niños y sus características, sin olvidar que cada niño no es un mundo sino un universo, y que hay excepciones a todas las reglas. La autora introduce las inteligencias múltiples y los estilos de aprendizaje, así como los tipos de cuerpo o doshas, como ejemplos de las distintas maneras en que podemos lograr entender mejor a nuestros alumnos y así poder servirles mejor.
En la tercera parte del libro, ‘Elementos técnicos’, se entra ya en la metodología, en el carácter general de una clase, en la creación de los temas que podemos compartir basados en valores, en la inteligencia emocional.
La cuarta parte del libro se titula ‘Yoga épico para niños’, y la autora introduce las actividades de yoga que siente que expanden la conciencia, tales como la meditación, la atención plena, el trabajo con la energía del corazón, el pranayama, los mudras, además de algunas actividades graciosas que se pueden realizar con los niños. Algunos juegos, asanas en grupo, masaje con los niños, entre otras ideas.
La autora
Christine McArdle nació en la ciudad de Nueva York y creció entre España y los Estados Unidos.Tiene un máster en Educación y ha enseñado en escuelas públicas y privadas a niños desde jardín de infancia a bachillerato, a alumnos en programas de magisterio a nivel universitario y a padres. Cree en los métodos educativos alternativos y ha recibido entrenamiento en escuelas Montessori y Waldorf (Rudolph Steiner) entre otros.
Empezó su travesía en el yoga durante su primer año como profesora y desde entonces ha combinado las dos prácticas creando así una pedagogía del yoga para, por y con niños. Después de haber completado su entrenamiento de 200 horas en Hatha Yoga estilo Iyengar y Kripalu en el año 2001, conoció el Anusara Yoga y completó sus estudios para obtener la certificación en este estilo.
Es la creadora del “Programa de formación para maestros de yoga para niños OM Shree OM», y ha entrenado a cientos de maestros en los tres continentes. Hoy en día es considerada como una voz profunda y potente en el mundo del yoga para niños.