Los seres humanos nos preguntamos, a lo largo de nuestra vida, sobre qué dirección elegir para poder alcanzar la felicidad. Nos movemos entre la búsqueda del placer, de la riqueza, el cumplimiento del deber y el anhelo de liberación del sufrimiento.
Los cuatro sentidos o metas de la vida se encuentran interrelacionados entre sí y, a su vez, mantienen su propia autonomía.
1. Dharma, se refiere al deber, la ética personal, aspirar a realizar algo noble en la vida. Relacionado con el papel que a cada persona nos corresponde desarrollar dentro del orden universal.
2. Kama, la búsqueda del placer, el bienestar, la satisfacción del deseo, el disfrute sensorial y sexual.
3. Artha, la adquisición de riqueza y bienes materiales, lograr una buena posición económica y social. En definitiva, alcanzar la seguridad a través de poseer y tener.
Estas dos últimas orientaciones están muy vigentes en el mundo en el que vivimos. A menudo se confunde la genuina necesidad de felicidad con la avidez desmedida y se valora el éxito de una persona en la vida por la consecución de posesiones y riqueza.
Dharma, el interés por hacer bien al prójimo, ayuda a orientar adecuadamente estos dos impulsos volitivos.
4. Moksha, la aspiración espiritual, un anhelo íntimo del alma de reencontrarse con el ser. La emancipación de todo aquello que nos condiciona, nos ata y nos impide ser libres. No como una huida, sino desde la madurez de la consciencia.
Cuando estas metas las experimentamos desde una orientación incorrecta, con carencia o con exceso, nos desestabilizamos. Este desequilibrio psicosomático genera estados mentales como la frustración, la inseguridad, la culpabilidad, la desorientación y el desaliento. Según el Ayurveda, la medicina tradicional hindú, pueden convertirse en causas de enfermedad.
La vivencia armoniosa de estas cuatro dimensiones de la vida aporta equilibrio a nuestra mente.
El yoga hace referencia a todo ello. El texto clave de la psicología y filosofía del yoga, los Yoga-Sûtras de Patañjali, nos recuerda la importancia de desarrollar una práctica mantenida con asiduidad y perseverancia, con actitud positiva, para generar un estado de integración. A través de las actitudes relacionales, yamas y niyamas, nos sugiere unas pautas idóneas sobre las que fundamentar las relaciones con los demás y con uno mismo. Explica con claridad y sabiduría la relación existente entre el deseo y el desapego.
Finalmente, la liberación llega cuando el yogui ha completado los Purusharthas, las cuatro metas de la vida, y ha trascendido los gunas, las tres cualidades de la naturaleza fundamental. Es, entonces, cuando «regresa a su Fuente, estableciéndose la consciencia en su pureza natural». (Sûtra IV.34)
El camino del yoga es una herramienta hábil que nos impulsa a realizar una reflexión sobre nuestra vida y su relación con estos cuatro objetivos. De este modo podemos alcanzar una vida material y espiritual más plena.
Lula Cañas, Formadora de Profesores de yoga de la AEPY
Nacho Collado, Profesor de Yoga de la AEPY
Encuentro de Yoga, los Cuatro Sentidos de la Vida
Del 18 al 23 de julio, disfruta de unos dias de Yoga junto al mar y la montaña, en la Sierra Calderona
Dónde: Centro Calima, Gilet, (Valencia)
Imparten: Lula Cañas Formadora de Yoga de la AEPY, miembro del Comité Pedagógico de la AEPY, y Nacho Collado Profesor de Yoga de la AEPY.
Precio: 440€ .Comida vegetariana
Contacto: – Lula Cañas 91-528.09.12 / 652-24.48.14 amanecer_lula@hotmail.com – Nacho Collado 625-87.48.12 colladoignacio@gmail.com