No tanto haciendo de visionario o rishi, sino estudiando algunos indicios, podemos vislumbrar cómo va a ser el futuro más o menos inmediato del Yoga en España. Y cómo será el yoga en el futuro en este país y en otros.
Ya el propio BOE, donde se regula las certificaciones de yoga (5 de septiembre de 2012) plantea este antiguo arte-ciencia como una formación profesional más dentro de los módulos de FP. A los que hemos trabajado en la enseñanza superior, esta perspectiva nos parece casi una ficción futurista. Pero vale, ahí ya tienen una primera predicción de esas que se llaman «autocumplidas». Si vivimos para verlo, también en ese caso las cosas podrían hacerse bien.
Cuando viajé por vez primera a Alemania, hace ya un buen tiempo, vi allí cosas que sólo llegaron a España decenios después. A mi bisabuelo le pasó lo mismo con Estados Unidos de América, país donde vivió una temporada. Y hoy sigue pasando lo mismo. Hace poco nos hicimos eco en yoasala.blogspot.com de que en el Aeropuerto de San Francisco se había habilitado una sala para la práctica del yoga. Creanme, en el futuro habrá salas de yoga hasta en los aeropuertos desérticos de provincias.
Igual con Londres, en cuyos megacentros de yoga suelen tocar con frecuencia esos grandes músicos que son Ignacio Béjar y Javier Rodríguez. Nos cuentan lo que es el gran éxito en aquel emporio del orbe: no centros gigantescos de fitnes, sino edificios enteros dedicados sólo al yoga (de diferentes tradiciones), el ayurveda y poco más. ¿Será esto un indicio de un futuro esperanzador que nos aguarda en estas latitudes? Ojalá.
Contemplando de nuevo nuestro futuro en el espejo de lo que ya ocurre en California, el yoga estará presente en la mayor parte de las escuelas y colegios como parte del curriculum. Y, por añadidura, estará presente en la mayor parte de las empresas. De modo que, cuando en España surja una Google o una Apple, entonces el yoga se prodigará en los centros de trabajo. O quizá incluso, por lógica, en el otro sentido, si el yoga estuviera más presente en nuestra sociedad mejoraría la pujanza de nuestras empresas.
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Master en Mindfulness
Otra predicción: la meditación estará (de hecho ya está) integrada en la enseñanza universitaria. Claro que ha debido ser traducida al inglés: «mindfulnes». Ahí tienen otra tendencia: todo estará más traducido al inglés, idioma en el que las cosas parecen como más científicas y modernas. En cualquier caso, tenemos que reconocer que no es lo mismo un «master en mindfulnes» que una «maestría en meditación (o en atención plena)» dicho en román paladino, que sonaría muy fuerte. Quien manda, manda. Y la cultura anglo tiene la voz cantante.
Volviendo a nuestro entorno geográfico y cultural, hasta ahora los certificados de profesores de yoga han sido un poco como el título que entregaba el Mago de Oz al Espantapájaros acompañante de Dorothy: un modo mágico de investirlo, en el cuento de «listo» y en el yoga de «profe». Pero, al haberlo oficializado, vía Reales Decretos, el proceso será inexorable: poco a poco se irán expendiendo certificados: regionales (pero previsiblemente válidos en toda España), federativos o como sea, que serán demandados por instituciones públicas primero, y por empresas y particulares después. Basta con observar el sentido de la historia, para hacerse idea del futuro.
En fin, que más valiera que nos concentráramos en el aquí y ahora, como recomiendan los grandes maestros de la sabiduría. Sin duda estaríamos más felices. Pero ya ves: la mente es inquieta y, como un mono, no para de saltar de idea en idea, aferrado a la memoria del pasado y creando ilusiones de futuro… Sigamos adelante… si el lector tiene paciencia…
Gran parte de la población practicará yoga
¿Y cómo será este yoga que se practique en el futuro? Como me escribía desde África Paco Ferrero refiríendose al Encuentro Libre de Profesores de Yoga que celebramos el 16 de febrero del 2014 en Málaga: «Considero que en múltiples ámbitos culturales y a lo largo de la historia, está probado que las convergencias en la diversidad sólo traen progreso, y en esta panoplia de procedencias, influencias y experiencias que hemos tenido la fortuna de aunar este domingo, puede ser una buena oportunidad de crecimiento en la dimensión no sólo profesional, sino personal, social o filosófica…».
En efecto, difundido y anunciado por yogaenred.com, aquel día en que 36 profesores de yoga de distintas escuelas practicamos en un mismo espacio, cada uno a su modo, y luego dialogamos, se dio un primer paso, en un encuentro único, hacia un horizonte que tal vez nos permita vislumbrar cómo puede ser el futuro del yoga y el yoga del futuro… si dejamos que suceda o empujamos un poco en ese sentido…
Gemma Lara y Jorge Zapata realizaron el vídeo como una ventana que nos permita verlo.
Quién es
Joaquín García Weil es licenciado en Filosofía, profesor de yoga y director de Yoga Sala Málaga. Practica Yoga desde hace veinte años y lo enseña desde hace once. Es alumno del Swami Rudradev (discípulo destacado de Iyengar), con quien ha aprendido en el Yoga Study Center, Rishikesh, India. También ha estudiado con el Dr. Vagish Sastri de Benarés, entre otros maestros.
