Educar hoy es adoctrinar esclavos orgullosos al servicio de su cuerpo y su mente. Estos viven y disfrutan de los objetos del mundo. Pero ¿para qué sirven los cuerpos y las mentes? Para autorrealizarse. Escribe David Rodrigo.
Expandir la consciencia de uno mismo hasta ser consciente de la propia naturaleza divina: siempre pura, libre, plena, sabia, satisfecha, infinita, omnipresente. Eso es EDUCAR. Educación de Plenitud Natural, inspirada en la autorrealización de los sabios/as y los santos/as de todos los tiempos y lugares; racional e intuitiva y, finalmente, flujo natural de la experiencia yo soy el que Soy. La “falsa filosofía”, “absurda metafísica” de la que hablaba Lord T. B. Macaulay, el creador en 1835 de la educación inglesa en la India.
Hoy tu cuerpo es asiento de percepciones, deseos y experiencias insaciables. Maestro de tu ser, cultiva tu cuerpo con el yoga físico para liberar su energía, flexibilizarlo y relajarlo de modo que no sea obstáculo sino vehículo de la expansión de tu consciencia.
Hoy tu mente es un calidoscopio, fragmentada en mil pedazos de distintos colores, sierva de los sentidos de tu cuerpo, y sufre, agitada y confundida. Creador de tus condiciones, dignifica tu mente. Cultívala con dhyana-yoga “yoga-meditación” y brahma-vidya “conocimiento de lo que Soy”. Re-corónala reina de tu ser. Cálmala con pensamientos, palabras y acciones bondadosos. Consciente de la unidad en la diversidad del universo. Relaja tu frente. Serena tu mente observando tu respiración profunda, pausada, diafragmática, extensa, equilibrada, tranquila. Repliégala en tu espacio interior. Concéntrala en el pensamiento de tu palabra sacra. Mantén esa concentración, medita, y tu mente transparente reflejará su asiento: el Sí Mismo.
El Sí Mismo es la fuente de toda felicidad, el Amado que los esclavos de la mente y los sentidos buscan inútilmente en los objetos y sus experiencias. ¿Cómo se hallará lo infinito en lo finito? ¿Cómo se logrará lo infinito si no se es ya infinito? ¿Cómo realizar el Sí Mismo infinito sino sumergiendo el vehículo de tu finita mente en Ello?
El sentido de la vida era el latir del Gurukulam, el sistema educativo de la India antigua al que el civilizador Imperio Británico dio el último empujón al abismo. Hoy está tuerto, pero aún respira.
La vida es un laboratorio del Sí Mismo. Practica durante largo tiempo, experimenta continuamente con todo tu ser y tus obstáculos caerán.
Contemplación del Ser y no-Ser de los que hablan los sabios/as y los santos/as que experimentan la Verdad en sí mismos.
Autoindagación. ¿Quién soy yo? Pienso luego existo. Soy consciente luego existo. ¿Quién es consciente en mí? En sueños soy consciente de mis sueños y no soy consciente de mi cuerpo físico. Por tanto, mi consciencia no es propiedad de mi cuerpo. En sueño profundo, sin sueños, soy consciente del vacío total y no soy consciente de ningún pensamiento ni emoción, que son la naturaleza de mi mente. Por tanto, mi consciencia no es tampoco propiedad de mi mente. Mi consciencia no tiene ningún otro dueño más que sí misma. Mi cuerpo cambia. Mi mente cambia. Mis experiencias, el mundo cambian. Todo cambia constantemente. Todo es efímero. Pero mi consciencia es una y la misma en todo lo efímero. Inalterable. La verdad en mí es lo que existe en mí siempre y no cambia. Consciencia pura. Yo soy Eso. ¿Y tú? Eso es lo que Es. La Verdad de todas las formas.
Autoobservación. ¿Qué es lo que conozco? ¿Desde dónde, con qué estoy conociendo? ¿Estoy reaccionando o siendo? ¿Condicionado o libre?
Contemplación en acción: Utiliza los sentidos, actúa, pero mantén tu corazón en la calma de tu Ser. Meditación pura.
Practica y tu ego conocedor, hacedor, meditador, experimentador se fundirá al fin con el Amado, como la serpiente imaginada en la cuerda y su experiencia se desvanecen en la cuerda.
Un viaje al Sí Mismo sin retorno, pues es la Existencia misma, la Consciencia sin forma, y lo otro es no-Existencia, como la serpiente vista en la cuerda.
Regresa a tu Hogar.
Luego vuelve al mundo sin problemas porque los objetos ya no colorean tu mente transparente, ya no agitan tu ser de pasión porque estás colmado, ya no te confunden porque ves directamente la Verdad una e indivisible de todas las formas, pensamientos y emociones, igual que tú ahora lees estas letras. ¿Te morderá la serpiente imaginada?
Vuelve a Casa.
Sistema Educativo de Plenitud Natural
No se puede enseñar lo que no se sabe. No se puede dar lo que no se tiene. El ejemplo es la enseñanza.
Compartir intrascendencia es perder intrascendencia. Compartir trascendencia es ganar trascendencia.
El ser humano es cuerpo, mente y espíritu que insufla consciencia a tu cuerpo y mente.
El sentido último de la vida es la libertad. Libertad de toda limitación. La limitación se debe a tu cuerpo, tu tiempo y tu espacio.
Libertad es felicidad. Lo limitado sólo puede experimentar placer efímero e impuro, condicionado y mezclado con deseo, sufrimiento y miedo.
Educar es elevar la consciencia humana a su naturaleza divina: siempre pura, libre, plena, sabia, satisfecha, infinita, omnipresente. Consciencia pura.
- Cultivar cuerpos y mentes sanos.Yoga físico.
- Alimentación y hábitos de vida saludables. Vegetarianismo. No alcohol, tabaco ni drogas. Autodisciplina sexual.
- No dañar a ningún ser, ni de palabra, pensamiento ni acción. Honestidad. Sinceridad. No robar. No posesividad.
- Pensamientos positivos: alegría por el bien de los demás; compasión por su dolor; indiferencia (no odio) por su maldad.
- Satisfacción con las condiciones mundanas. No confundir con resignación. Espiritualmente ambiciosos –autorealización aquí y ahora; consciencia de Cristo/Buddha/Shankara/Zarathustra…-, materialmente ecuánimes.
- Ascetismo. Austeridad. Autodisciplina de los sentidos y la mente. Responsables con el deber propio. Conscientes de la unidad de todos los seres. Devotos de la naturaleza divina en todo.
- Estudio de mensajes inspirados en la experiencia propia de la naturaleza del Sí Mismo. No de la palabra sino de su Silencio: significado. Reflexión, investigación. Contemplación.
- Autoindagación. Autoobservación.
- Quietud física. Con la energía de mi cuerpo fluyendo libre por su canal, la columna vertebral.
- Ejercicios de respiración. Consciencia de respiración. Observar tu respiración profunda, calmada, equilibrada, extensa, desde el diafragma. Así se serena la mente.
- Deja de correr con tu mente tras los sentidos de tu cuerpo, sus objetos y experiencias, y repliega tu mente en tu espacio interior, en la cueva de tu corazón.
- Concentra tu mente en la palabra sagrada para ti.
- Medita, permanece en esa concentración que expande tu consciencia regresando a tu Hogar: tu espíritu intocable, Consciencia unitaria, el Sí Mismo, lo Amado, fuente de toda felicidad.
- Contemplación en acción. Regresa al mundo animado por lo Amado y Ama a lo Amado con lo Amado. Sirve a todos los seres con todo tu ser manteniendo tu corazón en la paz del Sí Mismo, satisfacción indivisible, plenitud natural.
Adaptar esta enseñanza universal y eterna a las distintas sociedades y edades.
David Rodrigo García. Maestro de Filosofía India, esp. Advaita Vedanta, Sankhya, Yoga, Meditación
Coordinador de Dhyana Gurukulam, Swami Rama Sadhaka Grama Ashram
Rishikesh, Himalaya, India. Email: drodrigog@yahoo.es