En los últimos años, el yoga se ha convertido en una terapia cada vez más popular para tratar el dolor de la artritis, según confirman varios especialistas e investigaciones. Esta práctica milenaria está por tanto respaldada por una creciente evidencia científica, que muestra su eficacia para reducir el dolor y mejorar la función física en personas que padecen esta enfermedad.
La artritis es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta a las articulaciones. Puede causar dolor, inflamación y rigidez, así como limitaciones en la movilidad. Existen diferentes tipos de artritis, incluyendo la artritis reumatoide, la artritis osteoartritis y la artritis psoriásica. La artritis reumatoide es la forma más común de artritis entre los adultos.
La artritis reumatoide es la forma más común de artritis entre los adultos. Se estima que aproximadamente 350 millones de personas en todo el mundo padecen artritis. Esto incluye aproximadamente 54 millones de personas solo en Estados Unidos. En España son más de 2,2 millones de personas quienes padecen artritis. Esto incluye aproximadamente 200.000 personas con artritis reumatoide.
La artritis es una enfermedad crónica que puede provocar la destrucción de las articulaciones afectadas. Esto puede llevar a la deformidad articular, dolor y limitaciones en la movilidad. Algunos tipos de artritis, como la artritis reumatoide y la artritis psoriásica, son enfermedades inflamatorias autoinmunes que no son degenerativas. Sin embargo, la artritis osteoartritis es una enfermedad degenerativa que puede provocar la destrucción de las articulaciones afectadas.
El yoga se demuestra como un buen remedio
Kathy Riffey es una profesora de yoga certificada y terapeuta de salud holística con más de 20 años de experiencia. Especialista en yoga terapéutico para personas con artritis y otros trastornos de la salud, es miembro de la International Association of Yoga Therapists. Kathy ofrece clases privadas, talleres en línea y seminarios a través de su práctica de yoga.
Ella nos cuenta: «En los últimos años, el yoga se ha convertido en una terapia cada vez más popular para tratar el dolor de la artritis. Esta práctica milenaria está respaldada por una creciente evidencia científica, que muestra su eficacia para reducir el dolor y mejorar la función física en personas con artritis. Esto se debe a que el yoga combina posturas, respiración y meditación para relajar el cuerpo y la mente. Una de las principales ventajas del yoga para la artritis es que puede ser practicado en cualquier lugar y a cualquier edad, lo que le permite ofrecer alivio para el dolor sin los efectos secundarios frecuentes de los medicamentos».
Las posturas de yoga para la artritis que Kathy recomienda se dirigen a áreas específicas del cuerpo más afectadas por la artritis, como el cuello, los hombros, la espalda y las articulaciones. Estas posturas también ayudan a fortalecer los músculos, estabilizar las articulaciones y mejorar la flexibilidad. Algunas de las ásanas más útiles para aliviar el dolor artrítico incluyen la tabla (Shalabhasana), la postura del árbol (Vrksasana), el puente (Setu Bandha Sarvangasana), la postura del perro boca abajo (Adho Mukha Svanasana), la postura del gato (Marjaryasana) y la postura de la montaña (Tadasana).
Además de estas posturas, Kathy Riffey también recomienda algunas posturas de yoga adicionales para aliviar el dolor artrítico, como la postura de la silla (Utkatasana), el ángulo lateral (Parsvakonasana), la postura de la silla con levantamiento de piernas (Utthita Hasta Padangusthasana), la postura del árbol con toque de pie (Padahastasana), la postura de la montaña con una pierna levantada (Utthita Trikonasana) y la postura de la cobra (Bhujangasana).
También es útil para los pacientes con artritis hacer ejercicios de yoga específicos para aliviar el estrés, como la postura del perro boca abajo (Adho Mukha Svanasana), la postura de la montaña (Tadasana), la postura del árbol (Vrksasana) y la postura de la cobra (Bhujangasana). La práctica regular de yoga también puede ayudar a mejorar la resistencia física y la resistencia emocional para mejorar la calidad de vida en personas con artritis.
Por otra parte, un estudio publicado recientemente en la revista Rheumatology International también sugiere que el yoga es una terapia efectiva para la artritis reumatoide. Los investigadores estudiaron a 34 personas con artritis reumatoide que practicaron yoga durante 12 semanas. Los participantes practicaron ásanas, ejercicios de respiración y meditación.
Los resultados del estudio demostraron que los participantes experimentaron una mejora significativa en el dolor, la rigidez, el bienestar general y la calidad de vida. El yoga también fue más eficaz para mejorar la movilidad de la articulación afectada que otros tipos de ejercicios.
Los investigadores concluyeron que practicar yoga puede ser una estrategia eficaz para el tratamiento de la artritis reumatoide. Se recomienda que las personas afectadas consulten con un profesional de la salud antes de iniciar un programa de yoga para asegurarse de que es adecuado para sus necesidades específicas.