La prevención de la pérdida ósea relacionada con la edad es un tema de preocupación importante, especialmente para aquellas personas con factores de riesgo de osteoporosis. El yoga es una forma de ejercicio suave que se ha demostrado que tiene beneficios para la salud ósea, especialmente para la densidad mineral ósea y la fuerza muscular.
El yoga se ha asociado con una mejor calidad de vida, una mejor función física, una mejor función cognitiva, una mejor salud mental y un mejor bienestar general. Específicamente los estudios han encontrado que el yoga puede mejorar la densidad mineral ósea en la columna lumbar y los huesos de la cadera, así como aumentar la fuerza muscular en cadera e isquiotibiales.
Aunque los efectos a largo plazo de los programas de yoga en la salud ósea aún no se han estudiado completamente, sin embargo, los estudios preliminares sugieren que el yoga ofrece una forma segura, eficaz y asequible de mejorar la salud ósea, lo que aumenta la calidad de vida de la población en general.
Se recomienda realizar programas de yoga que incluyan posturas de equilibrio, flexión, extensión y torsión, así como ejercicios de respiración y relajación para obtener los mejores resultados.
Los programas de yoga deben ser individualizados para satisfacer las necesidades únicas de cada persona y estar dirigidos por un instructor calificado. Los participantes deben prestar atención a la forma correcta de realizar cada postura y hacer los ejercicios con cuidado y consciencia para evitar lesiones.
Los beneficios para la salud ósea del yoga se pueden maximizar cuando se combinan con otros tipos de ejercicio, una dieta saludable, suplementos nutricionales y un estilo de vida saludable.
Los estudios clínicos que abordan los efectos a largo plazo del yoga en la salud ósea aún están en curso, por lo que se necesitan más investigaciones para entender mejor la relación entre ambos. A medida que se descubran más beneficios, el yoga se convertirá probablemente en una herramienta importante para la prevención y el tratamiento de la osteoporosis y otras enfermedades relacionadas.
Además de los beneficios para la salud ósea, el yoga también se ha demostrado que tiene otros beneficios para la salud, como la reducción del estrés, la mejora del sueño, la reducción del dolor, el mejoramiento de la flexibilidad y la mejora de la función cognitiva.
(Leer artículo completo: https://journals.lww.com/orthopaedicnursing/Abstract/2021/05000/Yoga_and_Bone_Health.9.aspx)
12 posturas para la salud de los huesos
Un estudio analizó los efectos de 12 minutos de yoga diario durante un periodo de dos años en casos de pérdida ósea relacionados con la osteoporosis en mujeres posmenopáusicas. Los resultados mostraron que la práctica de yoga diaria redujo la desmineralización y la pérdida de masa ósea, mejorando así la densidad de los huesos.
Además de los resultados antes mencionados, el estudio también encontró que la práctica diaria de yoga mejoró la calidad de vida de las mujeres participantes, lo que se reflejó en mayores niveles de flexibilidad, fuerza muscular y equilibrio. También se descubrió que esa práctica redujo significativamente el riesgo de lesiones relacionadas con la osteoporosis; en resumen, supone una estrategia efectiva para mejorar la salud ósea en mujeres posmenopáusicas y para reducir el riesgo de fracturas relacionadas con la osteoporosis.
Estas fueron las 12 posturas que se practicaron:
Upavista Konasana, Bhujangasana, Ardha Chandrasana, Trikonasana, Ardha Matsyendrasana, Utthita Parsvakonasana, Utthita Trikonasana, Parivritta Trikonasana, Tadasana, Virabhadrasana I, Virabhadrasana II y Shavasana.
(Leer artículo original: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4851231/pdf/tgere-32-81.pdf)