Iniciamos la publicación de artículos sobre «la crisis de los gurús» como reflejo de la creciente inquietud que existe en el yoga a nivel mundial en torno a las organizaciones que practican dinámicas de culto y sus líderes. El primero es una contribución excelente de Paula Colantonio. (Todos estamos invitados a aportar conocimientos sobre este tema, que ya está influyendo decisivamente en la enseñanza del yoga).
Imagen de Omni Matryx en Pixabay
Los hechos
La comunidad mundial de Kundalini Yoga está en shock estos días a raíz de la cadena de denuncias que salieron a luz de abusos de distinto tipo y corrupción cometidos por su líder espiritual, Yogi Bhajan y algunos de sus hombres de confianza, y el encubrimiento que por años mantuvieron las organizaciones que fundó.
Todo se precipitó tras la publicación de un libro de memorias Premka: White Bird in a Golden Cage: My Life with Yogi Bhajan donde la autora, Pamela Dyson, relata situaciones de abuso que vivió por parte de Yogi Bhajan como su alumna y secretaria. Este hecho ha abierto un debate mundial en la comunidad de practicantes de Kundalini Yoga, que sentimos necesario en la transición a un paradigma acuariano.
El marco
¿Es esto un fenómeno excepcional? Lamentablemente no. Otros linajes y tradiciones del yoga ya han pasado por aquí. La lista impresiona. Mattew Remski en I Learned Yoga/Buddhism Through an Abusive Group. Now I Teach It. What Do I Do? los enumera al final de este brillante artículo: Ashtanga Yoga, Sivananda Yoga, Iyengar Yoga, Bikram Yoga, Jivamukti Yoga, Anusara Yoga, KYHF Chennai, Satyananda Yoga, SYDA Yoga (Muktananda/ Gurumayi), Rajneesh/OSHO, Himalayan Institute.
¿Qué tienen en común estas distintas escuelas? Una estructura vertical -propia de la era de Pisicis-, con su gurú, cadena de maestros, jerarquía, obediencia…
¿Cómo seguir adelante?
Además de los pasos que propone Remski en el artículo citado arriba para ayudar a las víctimas, me parece fundamental un cambio de paradigma, ya que dado sus resultados ese modelo de inspiración «tradicional» se revela, cuando menos, ineficaz.
Y en ese sentido me parece muy sugerente el enfoque de Theodora Wilcraft con su concepto de “Post-lineage yoga”. El yoga poslinaje no es antilinaje, o antipatrimonio. El yoga posterior al linaje describe la creciente tendencia de los profesores de yoga a buscar diversas fuentes de apoyo para su desarrollo. Nos habla de una red de pares (iguales) o de una comunidad horizontal de práctica.
Los profesores de yoga poslinaje aunque puedan enseñar un método único, verifican o contrastan esa fuente de conocimiento con su propia experiencia, con otros expertos y con sus amigos, estudiantes y colegas. El yoga posterior al linaje trata de grupos, no de jerarquías; sangha, no gurú.
Ejemplos de este tipo de estructura poslinaje son Yoga Nidra Network o el festival de Yoga Santosa Camp, cuyo lema es “casualmente” este año: «Descolonizando el yoga». Puedes encontrar la tesis completa de Wilcraft en Patterns of Authority and Practice Relationships in ‘Post-Lineage Yoga’ .
Para finalizar, mi deseo es que todo el dolor que estamos pasando en las distintas tradiciones y linajes de yoga sea el del parto de un mundo más compasivo, con personas empoderadas, conectadas a su maestro interior, buscando en su alma las respuestas a los desafíos de la vida. Nadie tiene las respuestas para tu vida. Sólo tú. En tu interior. “Quien mira hacia afuera, sueña; quien mira hacia adentro, despierta” (Carl Jung).
Somos la Vida expresándose a través del personaje que representamos; la Vida re-creándose, transformándose. Que tengamos la valentía de escuchar nuestro corazón para transmutar tanto dolor en una nueva forma de vivir el yoga.
La historia está por escribirse…
Namaste
Paula Colantonio. Cofundadora de Yoganet Barcelona.
–Su Formación en Yoga Nidra: 14 y 15 de marzo.
–Formación en Yoga para Empresas: 25 y 26 de abril.