Agosto de l972. En compañía de Almudena Haurie pongo rumbo a la India, mi país tantas veces soñado y ensoñado. Este primer viaje, que será seguido por muchos otros, ha de ser largo y fatigoso, desde los Himalayas a Tamil Nadu y desde la Bahía de Bengala a Bombay, a la implacable búsqueda de yoguis, mentores espirituales, eremitas, sabios, sadhus y especialistas en hinduísmo, yoga y budismo. Escribe Ramiro Calle.
Decenas de entrevistas en las que Almudena coopera como interprete. En los cuatro días que estamos en Rishikesh en este primer viaje, nos alojamos en el ashram la Vida Divina y entrevistamos largamente a varios de los swamis más relevantes, incluído el presidente, Swami Chidananda.
También entrevistamos a un buen número de médicos que investigan en el alcance terapéutico del yoga, tanto en unas como en otras zonas de la India. Es una incursión sin tregua en la sabiduría de la India, de la que habría de nacer una de mis obras más emblemáticas: La sabiduría de los grandes yoguis (Ediciones B), que no ha dejado de reeditarse. Sobre dicha obra, nacida del corazón y saturada de motivación espiritual, Zaniah, Guía para el estudio del conocimiento esotérico, ha comentado: «La sabiduría de los grandes yoguis es sin duda un libro extraordinario en su tipo, no solo por la información que aporta sobre el yoga y las doctrinas colaterales, sino por ser caja de resonancia de los máximos expositores, practicantes y místicos de la India actual».
A ése primer viaje han seguido muchos otros, pero aquel primero fue el más inspirador y también dificil en una India bien diferente y donde todavía Rishikesh, Benarés y otras ciudades sagradas conservaban parte de su pureza y no eran un hervidero de turistas en busca de lo insólito que pueda avivar su capacidad de asombro.
Más de cuatro décadas después de aquel fructífero viaje, Nicolas Gauhtier ha hollado parte de las tierras del país más insólito y variado del mundo para realizar su extraordinario documental Sadhaka, la senda del yoga, que recomiendo se visione en Vimeo, sobre todo para aquellos que quieren conectar con el verdadero yoga, ahora que muchos proponen un yoga que nada tiene de tal.
Aunque he hecho noventa y nueve viajes a la India, volveré. A menudo mi espíritu está allí, porque la India es mi aventura y no hay aventura como la India.
Ramiro Calle
Más de 50 años lleva Ramiro Calle impartiendo clases de yoga. Comenzó dando clases a domicilio y creó una academia de yoga por correspondencia para todo España y América Latina. En enero de l971 abrió su Centro de Yoga Shadak, por el que ya han pasado más de medio millón de personas. Entre sus 250 obras publicadas hay más de medio centenar dedicadas al yoga y disciplinas afines. Ha hecho del yoga el propósito y sentido de su vida, habiendo viajado en un centenar de ocasiones a la India, la patria del yoga.
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