Sencillamente se me ocurrió en una soleada mañana de diciembre. Me vino mientras practicaba yoga. Y aquí, con motivo del solsticio, que consideramos marca el fin y el principio de cada año, ofrendo, por si a algún lector le resulta de conforto o de interés, esta Oración del Yogui o de la Yoguini. Escribe. Joaquín G. Weil.
Agradecimiento
Gracias a los pies por humildemente sostener el cuerpo entero, desde el sagrado suelo qué gran y beneficiosa fuerza, qué gran relajo. Igual piernas, rodillas y caderas, que nos sostengan siempre con energía.
Gracias a las manos. Pido fuerza para ellas en la bondad de las acciones. A la ayuda, se le dice «echar una mano». El ser humano, el que humildemente usa sus manos. Igual brazos y hombros.
Gracias a nuestros intestinos y órganos. Démosles la comida sana y justa para manteneros saludables y felices. Comamos esa comida con agradecimiento y conciencia, y que sepamos compartirla con alegría.
Inmensa gratitud al pulmón que absorbe la energía-prana y al corazón que por el cuerpo la expande, y más allá con amor. Gracias por el aire que respiramos.
Gracias a los ojos que nos permiten ver las cosas, gracias a la hermosa y cálida luz del sol, y por la noche gracias a la blanca luz de la luna y las estrellas.
Gracias a los oídos que nos permiten apreciar el bello sonido de las cosas.
Gracias a la nariz y al olfato que nos permite apreciar y distinguir el olor de las cosas.
Gracias al tacto por palpar con las manos y sentir con el cuerpo.
Agradecimiento a los millares de sensaciones internas manifiestas y sutiles que aguardan su aventurado descubrimiento.
Gracias al mundo natural y al Universo todo por ser tan bello y generoso. Agradecido entonces a ese trozo del Universo en nosotros que es nuestro propio cuerpo.
Gracias a las personas que nos cuidaron y orientaron siendo bebés y niños: madres, padres y otros familiares y amigos. Gracias por el calor de su cariño y atención. Gracias a los buenos maestros y profesores por hacer de la enseñanza su oficio. Gracias por su paciencia, dulzura y tesón.
Gracias por poner a nuestro alcance tan valiosos conocimientos. Y por ayudarnos a valorarlos. Gracias por haber tenido la magnífica y preciada oportunidad de conocer el Yoga y la Meditación, y por disponer de la salud, el sustento, la comprensión, la energía y el tiempo para poder practicarlos.
Gracias por la luz del agradecimiento.
Ruego
Por favor, que todos los que sufren, encuentren salud y alivio. A los que tengan frío, por favor, hallen abrigo y cobijo. A los que padezcan calor te ruego consigan agua, frescura y sombra. Que los hambrientos ojalá encuentren alimentos. A los saciados, te pido con humildad les concedas gratitud y moderación. A los ancianos, por favor, otórgales seguridad, conforto y cuidados de los más jóvenes. A los bebés, niños y jóvenes, te ruego dispongan de la proximidad, el cariño, la guía y cuidados de sus mayores.
Votos
Gracias por la comprensión y la luz de nuestras mentes. Ojalá podamos encontrar el modo de se útiles a todos los seres y a nosotros mismos. Que dispongamos de la paz y la alegría para acertar en nuestra encomienda. Que la energía acuda a nuestros cuerpos y mentes para realizar nuestros objetivos benéficos. Rogamos tener la oportunidad de convivir en armonía y cooperar con amor hacia una Humanidad más justa y más pacífica. Que podamos enfocar nuestras mentes hacia lo bueno, lo hermoso y lo verdadero. Pedimos, por favor, encontrar paciencia en nuestro aprendizaje.
Por favor, danos claridad mental, memoria, ánimo de corazón y fuerza para transmitir los conocimientos recibidos, practicados y comprendidos, con agradecimiento y veneración a los maestros fundadores y sucesores de nuestra disciplina y ciencia. Y concédenos que a ti, maestro primordial, sepamos buscarte en nuestros adentros. Te rogamos alcancemos el recuerdo de lo importante y verdadero en los momentos de apuro y también en los ratos de alegría y contento.
Que sepamos comprender y sentir (el yoga) la unidad en lo diverso. Que esta comprensión y sentimiento nos haga generosos y felices.
Paz, amor, salud, energía, alegría y luz para nosotros y todos los seres.
Sagrado Om. A-U-M.
Este texto lo firmo, porque es convención hacerlo. Si bien a través de estas líneas autorizo expresamente a reproducirlo libremente en todo o en fragmento. Pertenece a toda aquella persona que quiera hacerlo suyo. Animo a quien lo leyere a emprender o continuar a su propio modo una oración que de esta manera no cese.
Málaga 10 de diciembre de 2014.
Quién es
Joaquín García Weil es licenciado en Filosofía, profesor de yoga, director de Yoga Sala Málaga. Practica Yoga desde hace veinte años y lo enseña desde hace once. Es alumno del Swami Rudradev (discípulo destacado de Iyengar), con quien ha aprendido en el Yoga Study Center, Rishikesh, India. También ha estudiado con el Dr. Vagish Sastri de Benarés, entre otros maestros.
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