Las razones de la mente del adolescente

2013-11-27

Poder observar la mente de los adolescente en las sesiones de MBCT (Mindfulness Based Cognitive Therapy) me ha hecho pensar que realmente no les damos espacio para ser escuchados y para permitirles que se escuchen ellos mismos. Por Josep Maria Gasset para Espacio MIMIND.

adolescentes

Para mí es una gran experiencia observar la mente del adolescente, cómo poco a poco, a través de las semanas, va tomando diferentes formas, para acabar conectando con lo más esencial de sí mismo: la respiración. En este grupo he podido observar los cambios que surgen al darles espacio para que su mente pueda expresarse.

Llegan estresados a las sesiones, después de haberse levantado muy temprano, soportado el trajín urbano, los desplazamientos y las clases.Tras haberse autoexigido y sentido exigidos por profesores y padres, todo en un mundo cambiante que es muy difícil entender por sus mentes que están conformando un pensamiento que apenas si tiene consistencia y muy poco espacio.

A través de ellos me están mostrando la mente neurotizada de los padres y de los profesores que no les permiten expresarse y que difícilmente ellos pueden contradecir. “Debes hacer esto”, “compórtate de esta manera”, “no hagas”, “debes”… Y poco espacio para “qué siento”, “cómo lo siento”, “qué me pasa”.

Cabezas llenas de contenidos sin sentido y con muchas inquietudes que no pueden expresar, sentimientos y abatimientos de algo que no comprenden. Hormonas y metabolismos cambiantes, cuerpos que se transforman a una velocidad que no puede ser engullida por la vida que florece.

Minfulness para adolescentes

Nunca pensé que mis aprendizajes de Mindfulness en las muy sabias paredes de Oxford pudieran dar estos frutos con esas mentes en formación. El Mindfulness para los adolescentes es una de las mejores inversiones para ayudar a estos seres que deberán enfrentarse a ellos mismos en las diferentes etapas de sus vidas y autorresponsabilizarse de los diferentes procesos de crecimiento y en la completación de sí mismos.

¿Por qué es tan beneficiosa esta práctica? Pues primeramente porque les damos un espacio para respirar. La respiración y el aprendizaje de cómo respirar les permite rebajar los niveles de estrés y ansiedad y les conecta con su esencia. Les da un ritmo y les permite calmar su mente y concentrarse mejor.

A las tres semanas del entrenamiento en la ronda de preguntas, al iniciar la sesión les pregunté que si habían notado algún beneficio en sus prácticas diarias. Y todos respondieron que su mente estaba más calmada y que se podían concentrar mejor. También que cuando había alguna dificultad en la clase o en casa, respirar mediante las técnicas de Mindfulness les había permitido superarlas mucho mejor. Algunos estudiaban mejor o no estaban tan nerviosos en las clases o con ciertos profesores, toleraban mejor a sus compañeros y a sus familias, ya que podían reconocer qué era lo que les estresaba y dónde se depositaba en su mente y en su cuerpo.

Eso sí, debemos darles espacio para sentir y expresarse, también para sentarse a su manera a meditar y para reconocer sus emociones en su cuerpo. Y para poder reconocerse en esos cuerpos que se están conformando en adultos y que quieren llamar la atención con sus gesticulaciones y bromas, pero que en definitiva solo quieren hacerse un espacio en este mundo tan difícil de gestionar tal y como se lo estamos entregando.

Uno de estos muchachos era deportista de alto rendimiento, y me llamó la atención cómo estaba utilizando el Mindfulness para calmar su mente durante los largos entrenamientos e incluso en su competición. Reconocidos jugadores de baloncesto americano y de rugby australiano, atletas y deportistas lo utilizan con éxito para lograr la calma mental y la concentración, que les llevará a fluir en la competición. En una de las sesiones veíamos como Tom Cruise fluía de su entrenamiento con los samuráis y cómo hasta que él no abandonaba su mente y se dejaba en las manos del no hacer haciendo con mente de principiante, no podía combatir con su adversario de igual a igual.

Pensamientos recurrentes

La mente de los adolescentes es entrenada semana a semana para poder observar su mente y ver si su mente está llena, con un tráfico congestionado, o si su mente recurrente está repleta de etiquetas que hace que no puedan liberarse de patrones.

Un día les pedí que hicieran una lista de pensamientos recurrentes y su respuesta fue la siguiente: “No podré”, “No seré capaz”, “Los demás no me aceptan”, “Los demás me juzgan”… Pero cuando analizábamos la consistencia de los mismos, veíamos que obedecían a patrones que habían aprendido, ya de sus padres, ya de sus compañeros o con los profesores que no les habían sabido motivar, y pasamos a desmontar de su mente ilusoria estos pensamientos negativistas recurrentes. Luego sustituimos estos pensamientos por aquellos que ellos eran capaces de reconocer como suyos y a los cuales se pudieran comprometer autorresponsabilizándose de ellos mismos.

He podido observar que los adolescentes necesitan diferentes técnicas de meditación para calmar su mente y conectar con la respiración, y también que los tiempos cortos son los mejores. Por eso recurrimos a tiempos de 2 o 3 minutos y máximo de 7 minutos, aunque un día exploramos los 15 y 20 minutos. Aconsejo que estos tiempos largos solo se hagan cuando se den unas condiciones muy especiales de su mente.

Veo cómo la mente de los adolescentes va cambiando semana a semana, cómo el grupo se apoya y resuelve, cómo son capaces de visibilizar su mente y expresar sus emociones. Poco a poco van liberándose de las corazas y van mostrando su verdadera naturaleza, la verdadera naturaleza de la mente.

Algunos están enseñando a sus padres, les hacen dar cuenta de su estrés y de su sinsentido al gritarles o hacerles sentir culpables por cualquier hecho. Ellos están comprendiendo, a través de la neurociencia que les enseñamos, cómo funciona su cerebro y su pensamiento, por eso yo me he convertido en su alumno. Aprendo de ellos para poder entender mejor mi mente y mi pensamiento, para poder luego trasmitir mejor la Atención Plena.

estudiosContemplativos