Dos amantes celestiales, economía y espiritualidad

2013-05-09

Desde antiguo en la cultura india ha existido, a través de fábulas y mitos, el afán de conjuntar la sabiduría y la abundancia o prosperidad. Este empeño interesa no sólo al mundo de la espiritualidad, pero también al de la economía. Escribe Joaquín G. Weil.

GaneshaMiles de personas, en los tiempos recientes y a lo largo de la historia, han colaborado en la difusión del yoga y la meditación. Pero si hay alguien que podamos destacar entre los contemporáneos, ese es, tal vez de modo involuntario, Steve Jobs.

Sé que esta afirmación puede sonar sorprendente, pues todos tenemos maestros de nuestra predilección que consideramos con méritos suficientes para encabezar la lista. Sin embargo, cuando alguien quiere insinuar que los meditadores, vegetarianos, yoguis o yoguinis, etc. son unos soñadores o quijotes ilusos, basta con citarles el nombre de Steve Jobs para cercenar sus argumentos de inmediato. En efecto, el genial empresario californiano es un doble tótem, ejemplo de eficiencia empresarial, pero al mismo tiempo y por veces, paladín de la estética zen, el estilo sencillo y la pulcritud tecnológica. Eso sin dejar de lado su vertiente nada frívola de buscador y meditador, como ya he comentado en otro lugar.

Entre sus libros predilectos se encontraban (por este orden): Autobiografía de un Yogui, de Yogananda; Mente Zen, Mente de Principiante, de Sunryu Suzuki, de quien fue directo seguidor y cuyo discípulo, Kobun Chino, ofició su boda; y por último Be Here and Now, de Baba Ram Dass, que dio a conocer a su maestro Neem Karoli Baba en Occidente. Todas estas funtes yóguicas y meditativas las aplicó exitoso en su intensa vida empresarial, como atestigua su biógrafo autorizado, Walter Isaacson.

Si bien la formación yóguica y meditativa fue probablemente un factor de éxito para Jobs, sin embargo no podemos establecer una ecuación entre inteligencia e iluminación, satori, samadhi o cosa parecida. La historia del zen está llena de relatos sobre gentes iletradas, llanas o incluso torpes en otros aspectos de la vida, que alcanzan el satori, mientras que sus colegas más intelectuales, exitosos y brillantes tenían que conformarse con un conocimiento meramente teórico de las verdades eternas. Ejemplos semejantes siguen sucediéndose hasta nuestros días.

Lakshmi y Saraswati

En la India antigua eran la clase de los reyes, guerreros y gobernantes, los chatrias, los que más se inclinaban a la práctica del yoga y la meditación. Buda pertenecía a esta casta, Mahavira y Patanjali también. Por otra parte, los sanniasins, los sadhus o renunciantes, ascetas, anacoretas, profesaban también estas disciplinas, en ocasiones en condiciones de indigencia.

Existe una creencia tradicional india según la cual Lakshmi, diosa de la abundancia, y Saraswati, diosa de la sabiduría, son dos amantes rivales irreconciliables y celosas. Quien ama a la una, recibe irremediablemente el rechazo de la otra. Este dilema lo expone Deepak Chopra en un cuentecillo fácil de encontrar en la red. Pero ya en la propia fábula se habla de la necesidad de reconciliar ambas esferas.

Igualmente en las publicaciones de economía de India se recurre a este mito de las dos diosas para hablar de la necesidad de reconciliar la sabiduría con la prosperidad y viceversa, no sólo por intereses económicos, sino en beneficio de las personas.

Las sabidurías y prácticas de Oriente aplicadas a la empresa además de germinar en Apple y Pixar, también arraigaron en otras célebres compañías. Sin ir más lejos, en la competencia directa, en Google, destaca la figura del Dr. Larry Brilliant, discípulo de Neem Karoli Baba, el guru que infructuosamente quiso encontrar Steve Jobs en su viaje a India. El Dr. Larry Brilliant, además de promover importantes iniciativas filantrópicas, fue presidente de Google.org, la fundación altruista de la empresa de Mountain View.

También en Google, Chade Meng Tan, uno de sus primeros y principales ingenieros, tras estudiar con diversos maestros, ideó un programa de Mindfulness o Meditación llamado SIY, siglas de Search Inside Yourself (Busca dentro de ti mismo). Y lo hizo en el 20% de tiempo de su jornada laboral que la empresa cedía a sus ingenieros para que lo emplearan a voluntad. En este programa SIY ya han participado millares de empleados de la propia Google y de otras empresas.

Y Ganesha

Ya en España, el empresario, inversor y bloguero periodístico Alejandro Suárez dice en uno de sus artículos que «los empleados felices son leales, productivos, más creativos y buenos embajadores para nuestra empresa». Y sigue argumentando en ese escrito que la felicidad no puede medirse sólo en términos materiales.

Finalmente en la figuración se resuelve el dilema entre Lakshmi, diosa de la prosperidad y Saraswati, diosa de la sabiduría. A Ganesha, el Vignesha, el que quita los obstáculos, divino patrón del aprendizaje, las artes y las ciencias, se le representa casado con ambas divinidades, donde se aúnan espiritualidad, felicidad y abundancia.

Joaquin Garcia Weil (Foto: Vito Ruiz)Quién es

Joaquín García Weil es licenciado en Filosofía, profesor de yoga y director de Yoga Sala Málaga. Practica Yoga desde hace veinte años y lo enseña desde hace once. Es alumno del Swami Rudradev (discípulo destacado de Iyengar), con quien ha aprendido en el Yoga Study Center, Rishikesh, India. También ha estudiado con el Dr. Vagish Sastri de Benarés, entre otros maestros.

http://yogasala.blogspot.com